¿Privacidad en la era digital colombiana?
Más allá de toda las consideraciones políticas y chismes luego de conocerse la actividad hacker del gobierno un tema pasa desapercibido: la privacidad.
¿Es importante la privacidad?. Probablemente sí. Sobre todo si el artículo 15 de la Constitución afirma que todas las personas tienen derecho a su intimidad personal y familiar. Igualmente, tenemos el derecho a que nuestra correspondencia, y otras formas de comunicación privada, no sean violadas.
El derecho a la privacidad parece surgir como una columna inherente a la humanidad. Este derecho es tan importante que ha generado reglas mínimas en la sociedad para que sea preservado.
Y justo el tema de la intimidad está en juego o en tela de juicio en estos momentos debido a las revelaciones que hizo Semana.com donde mostró como unos civiles expertos en seguridad informática , supuestamente, trabajaban para el ejercito. Su labor, una sola: acceso a información privada digital. Ir en contra de la constitución política de Colombia.
Que en un lugar del tradicional barrio Galerias unas personas creen una base de operaciones para irrumpir en la privacidad de ciudadanos colombianos es grave.
Plantea una serie de interrogantes que deberían preocupar a toda la sociedad. Sobre todo en un país en el cual se mata por pensar diferente. Donde se premia el ser borrego y donde el pensamiento independiente es castigado y humillado.
Históricamente, una buena parte de los hackers del mundo han luchado por mantener la privacidad en Internet. No obstante, existen otras miradas, por ejemplo quienes dicen que la privacidad en la web no debería existir. ¿Quién tiene la última palabra?.
Una cosa es clara: en los últimos tres años las autoridades colombianas – policía y ejercito- han dejado ver lo que opinan sobre la privacidad en la era digital.
Ideas como P.UM.A, el Conpes de ciberseguridad, Andromeda, la Ley Lleras I, la Ley Lleras II y ahora los convenios del TPP, parecen enviar un mensaje: El país no necesita de privacidad en la era digital. Control, chuzadas, interceptaciones ilegales, scan de llamadas bajo una Ley de Inteligencia, descubrir la dirección física de un ciudadano con el dato de la IP sin necesidad de orden judicial, entre otras, marcan el camino.
La privacidad en un país como Colombia debería ser un derecho defendido por todos. Probablemente salve vidas en medio de esta selva en la que vivimos donde cualquier idea contraria o desestabilizadora es castigada con severidad.